Por el camino nos encontramos gente de lo más variada, con sus cositas, con sus rarezas, con sus manías y sus formas de ver la vida. Esa gente de la que he comentado otras veces que podemos aprender mucho o desaprender.
A veces nos descuadran y hasta nos sacan de nuestras casillas, y eso molesta, inquieta, revuelve y hasta duele.
Pero yo prefiero pensar que de ahí siempre podemos sacar algo bueno, o por lo menos aprender a tener cada vez mas claro el asunto, aunque solo sea lo que no queremos parecernos a ellas, pues ya es algo, que no es poco.
Animo E, pon distancia, para que no duela, al fin y al cabo, ella se lo pierde.
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